Smallfoot (Pie Pequeño)
El verano ha muerto, y no lo digo solo porque la fecha de este artículo sea a finales de septiembre. La temporada de grandes producciones hollywoodenses ha mermado ya, y hasta la próxima temporada navideña no veremos estrenos esperados. Pero entretanto eso pasa, podemos darle revisión a las funciones de ‘por mientras’ y eso hacemos aquí, con el estreno de «Pie Pequeño».
Migo es un “yeti” común (¿?) y corrriente. Viviendo apacible en una sociedad de otros “yetis” y entusiasta con su destino como próximo heredero de la profesión de su padre. Todo parece ir bien en su vida, hasta el momento en que deja de ser así. Pues ha descubierto evidencia indudable de la veracidad del mito sobre la existencia del legendario ‘pie pequeño’. Y ahora, su vida y la de su conformista congregación no volverán a ser las mismas.
Poco esperaba de esta producción. Para empezar, ni siquiera la tenía en el radar hasta que, de pie frente a la cartelera, me di cuenta de que el verano había fenecido. Y en su primer acto, la cinta me hacía justificar la anti-social actitud del espectador de la fila de adelante (que no dejaba de iluminar mi día con su conversación vía celular) por lo tediosa que era. Luego la historia tuvo un pequeño levantamiento a la mitad y pasó a ser más pasable.
Estamos ante una clásica trama del personaje disruptivo que se rehusa a aceptar las reglas tal y como han sido desde siempre y, en noventa minutos de aventura, nos da la gran lección de cajón: pensar por nosotros mismos e ir en la búsqueda interminable por la verdad. A punto estaba de abandonar la esperanza de ver un desenlace emotivo y de gran peso dramático; ese, del estilo magistral que Warner nos mostró con «El Gigante de Hierro»; cuando de repente… resultó que la película ya había terminado.
Ya por último, y aunque no es una pésima película —para ‘los pequeñines del hogar’— solo tengo una queja. Y es al respecto de la selección de elenco para el doblaje latinoamericano. ¡Qué voces! Digo, no porque se trate de un trabajo de animación tengan que exagerar sobre-actuando-cada-una-de-las-palabras. Válgame.
¿Recomendable? Como para entretenerse en famila. Búsque por favor algo más maduro si no hay niños cerca.
¿Memorable? Nop.
¿Trascendente? Va a quedar sepultada bajo los cerros de otras producciones medianas en el catálogo de su proveedor de ‘streaming’ de preferencia.